- Estefania Valle - Fotografia: 2015

lunes, 13 de abril de 2015

¡Buen viaje Kitty!

Hace tres días que emprendiste ese "viaje" sin retorno de forma absurda e inesperada y tu ausencia se nota. Fuiste mi regalo de cumpleaños hace ya algo más de 7 años y en todo este tiempo pasaste de ser una mascota a un miembro más de la familia. Siempre fuiste muy buena, salvo alguna trastada puntual, decíamos que tenías carina de "gato con botas" (como el que sale en Shrek) y tenias unas patucas muy fuertes que nos hacían pensar que ibas a ser un gato grande. Eras una gata mimosa, por las mañanas venias a reclamar una buena dosis de mimos y caricias, cuando jugábamos te cambiaba la expresión de la cara y parecías un cachorrín otra vez, te encantaba salir a la terraza y estar tirada en el suelo, revolcarte haciendo la croqueta, jugando con la pluma de algún pájaro,... .No había puerta que se te resistiera, si abría para fuera la empujabas con tu cuerpín y si era para dentro metías un poco la patuca y la empujabas hacia ti, cazando moscas pegabas unos saltos de escándalo y tenías una graciosa forma de corretear que hacia que tu mollete rechoncho se moviese para los lados.

Ay Kitty, cuantos buenos recuerdos nos dejas... tus mil posturas para dormir, tus ronquiditos, los movimientos que hacías cuando tenías un sueño, los maullidos guturales cuando estabas en celo, lo poco que te gustaba bañarte y lo que te prestaba que te peinase. Como me gustaba verte a ti y a Cana dormir juntinas, veros luchar y como le ponías la pata en la cabeza para frenarla, tu exquisitez a la hora de comer, lo mucho que bebías y la cantidad de veces que bostezabas.

Recuerdo aquella época que por algún extraño motivo estabas cargada de electricidad estática y pegabas muchos chispazos, la vez que bebiste caldo de la fabada y al ratito nos tiraste un pedo asesino, la vez que saliste corriendo detrás de otro gato y tuve que ir a buscarte al portal de al lado,..

Kitty, Kitty... cuantas particularidades que te hacían chachi y única y que ahora ya sólo me quedan en el recuerdo. Que raro pensar que el viernes por la mañana te daba unos mimos mientras hacía el desayuno sin saber que iban a ser los últimos, que poco después te ibas para no volver. Me consuela pensar que no debiste sufrir, te fuiste rápido y en silencio.

Bueno bichín, si existe el cielo gatuno espero que estés rodeada de todo aquello que tanto te gustaba y que seas el ángel dela guarda de Canita que ahora está muy triste sin ti.