Hace años, cuando estudiaba en La Laboral, aprovechábamos las clases de Fotografía para explorar por el edificio. En una de nuestras salidas descubrimos la antigua residencia de estudiantes, la cual, parecía el escenario de una película ambientada en la Guerra Civil. Ver lo que algún día fue un hogar para muchos jóvenes, lleno de recuerdos, de historias... ahora abandonado y silencioso.
Sin duda, si hay algo de lo que me arrepiento, es de no haber salido a explorar en más ocasiones, escondiéndonos de los bedeles y haciendo fotos de sitios tan mágicos como este.
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